Con el presente libro se procuran diferentes propósitos. El primero es
reconocer las tesis distintivas y características del iusnaturalismo o
realismo jurídico clásico, o sea, aquella filosofía jurídica que remite
centralmente a Aristóteles y a Tomás de Aquino, pero que
contemporáneamente se expresa en autores como M. Villey, G. Kalinowski y
J. Finnis. El segundo consiste en identificar los rasgos fundamentales
del neoconstitucionalismo, especialmente en su versión no positivista
representada paradigmáticamente por Robert Alexy, Ronald Dworkin o
Carlos Nino. El tercero es comparar aquellas dos teorías para señalar
coincidencias y diferencias. El autor pretende corroborar que la
realidad actual refleja y requiere para su comprensión, enseñanza y
operatividad de teorías no positivistas como las señaladas. Al mismo
tiempo se empeña en dialogar racionalmente con otras teorías diferentes a
la que adhiere en orden a descubrir encuentros y desencuentros. Las
perspectivas referidas remiten fundamentalmente a Aristóteles por un
lado y a Kant por el otro. Entre las coincidencias más decisivas están
las tesis que no cualquier contenido puede ser Derecho y en confiar en
la existencia de una razón práctica capaz de responder cuestiones
morales o axiológicas, pero ese encuentro no excluye diferencias y
distancias que conviene reconocer.
Con el presente libro se procuran diferentes propósitos. El primero es
reconocer las tesis distintivas y características del iusnaturalismo o
realismo jurídico clásico, o sea, aquella filosofía jurídica que remite
centralmente a Aristóteles y a Tomás de Aquino, pero que
contemporáneamente se expresa en autores como M. Villey, G. Kalinowski y
J. Finnis. El segundo consiste en identificar los rasgos fundamentales
del neoconstitucionalismo, especialmente en su versión no positivista
representada paradigmáticamente por Robert Alexy, Ronald Dworkin o
Carlos Nino. El tercero es comparar aquellas dos teorías para señalar
coincidencias y diferencias. El autor pretende corroborar que la
realidad actual refleja y requiere para su comprensión, enseñanza y
operatividad de teorías no positivistas como las señaladas. Al mismo
tiempo se empeña en dialogar racionalmente con otras teorías diferentes a
la que adhiere en orden a descubrir encuentros y desencuentros. Las
perspectivas referidas remiten fundamentalmente a Aristóteles por un
lado y a Kant por el otro. Entre las coincidencias más decisivas están
las tesis que no cualquier contenido puede ser Derecho y en confiar en
la existencia de una razón práctica capaz de responder cuestiones
morales o axiológicas, pero ese encuentro no excluye diferencias y
distancias que conviene reconocer. 
